SANTIAGO, 10 sep (El Mercurio) — En su primera actividad pública como presidente ejecutivo de Codelco, Octavio Araneda asistió ayer a la comisión de Medio Ambiente del Senado, donde fue requerido para dar explicaciones de la posible responsabilidad de la estatal en la crisis ambiental de Quintero.
El ejecutivo aseguró que en las más de 200 fiscalizaciones recibidas en el último año, nunca han detectado irregularidades en las instalaciones de la fundición Ventanas, ubicada en la zona de sacrificio de la Región de Valparaíso.
En esa línea, aseguró que la inversión de US$158 millones en esa división es la más grande en la historia de esa zona con fines ambientales, desembolso que además es parte de los US$2.200 millones que impulsó la Corporación para adecuarse al decreto supremo 28, que norma la captación de gases. “Con estos proyectos no vamos a producir ninguna libra de cobre más”, advirtió Araneda.
El ejecutivo reveló que la fundición corrió el riesgo de verse obligada a parar luego de la nueva normativa ambiental impuesta en la zona a comienzos de este año -el plan de prevención y las normas de calidad- pero que gracias a holguras que quedaron del proyecto de adecuación al DS28 se logró superar estas nuevas exigencias.