SIDNEY, 29 sep (EFE) — El Gobierno de Australia confirmó este viernes la reanudación de sus exportaciones de heno a China -bloqueadas desde febrero de 2021- en un paso más en el acercamiento entre ambos países para normalizar sus relaciones diplomáticas y comerciales.
Estas exportaciones se paralizaron hace más de dos años cuando caducaron en China los permisos comerciales de 25 empresas australianas que comercializan heno, de las cuales solo tres de ellas pudieron renovarlos y continuar con sus actividades.
Pero en un paso más hacia la normalización de las relaciones bilaterales, las autoridades chinas emitieron el miércoles nuevos permisos para veinte empresas y renovaron las autorizaciones para otras dos.
Al confirmar la medida, el Ejecutivo de Camberra recalcó que “acoge con satisfacción” la decisión para reanudar las exportaciones de heno a China, dijo un portavoz del Ministerio de Exteriores en un comunicado enviado hoy a EFE.
La medida supone nuevamente la recuperación de las exportaciones de heno a China, el principal socio comercial de Australia, que antes de esta suspensión suponía envíos anuales de 360.000 millones de toneladas de este producto, cuyo monto total era de unos 160 millones de dólares australianos (103,3 millones de dólares estadounidenses o 97,6 millones de euros).
El mes pasado China decidió eliminar los aranceles del 80,5 % que impuso a la cebada de Australia en 2020, una medida que bloqueó un mercado valorado en unos 916 millones de dólares australianos (581 millones de dólares o 559 millones de euros) en el año fiscal 2018-19.
Los aranceles a la cebada y los problemas de renovación de los permisos para las exportaciones al heno se enmarcaban en una serie de restricciones que Pekín impuso en 2020 contra varios productos australianos, como el vino, el carbón, la langosta y la madera, entre otros.
Australia aún lucha por restaurar el comercio con China de la langosta, la carne y el vino.
Las medidas fueron impuestas por China después de que el Gobierno del entonces mandatario australiano Scott Morrison (LON:MRW) impulsara una investigación sobre el origen de la covid-19, aunque China niega que éste fuera el motivo.