NUEVA YORK, 19 dic (Reuters) — Vendedores occidentales de marcas de lujo buscan ahora sacar provecho de los estudiantes chinos adinerados residentes en el extranjero, en la medida que la desaceleración del crecimiento y la política anti-corrupción ha mermado las utilidades de este sector en el interior del país asiático.
Los consumidores chinos representan el 31 por ciento del mercado de productos de lujo personal a nivel global, con 273 mil millones de dólares, de acuerdo con Bain and Co, y los Estados Unidos es el mercado más grande fuera de Asia.
Los estudiantes chinos están comprando bolsos Louis Vuitton y Gucci, zapatos Tory Burch; así como las modas de Fendi, Alexander McQueen, Bottega Veneta e Yves Saint Laurent, entre otros, según entrevistas recientes en Nueva York.
Un 29 por ciento de los padres con elevado poder adquisitivo en China, envían a sus hijos al extranjero a estudiar, gran parte de los cuales elige instituciones académicas de Estados Unidos, según el Informe Hurun, que publica una lista anual de las personas más ricas de China.
Turistas y visitantes chinos en el extranjero tienen una larga tradición de hacer compras para amigos y familiares, de modo de evitar impuestos y falsificaciones, al interior del país asiático.
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